4 de noviembre de 2010


Me quise sentir fuerte ese día, soltándote la mano lentamente con una sonrisa como si nada ocurriera. Pero estaba soltando mi vida, estaba dejando atrás lo que más amaba en esta vida. Estaba dejando de ser yo para encontrar la salida a tanta desesperación por tratar de ser feliz. Y tu mirada triste aceptaba todas mis ofertas brindadas contra mi voluntad, como si alguien se metiera en mi cabeza, colocando palabras que jamás llegaría a sentir mi corazón. Pero aquel día mi razón tuvo la palabra, y aquellos sueños que habíamos creado juntos se iban desaciendo entre mis manos poco a poco como cada lágrima que al final del camino recorría el fin de mi mejilla. Sabíamos que aquel día iba a ser el comienzo de algo nuevo. Y quizás no hayamos encontrado aquel final, y tal vez aquel dolor deje de transformarse en algo tan poco esencial para nuestro amor, ese amor que tanto nos cuesta mantener, pero que al fin y al cabo aún se mantiene vivo.

1 comentario:

sofia dijo...

Me en can to!!!!:D
muy buen bloog!
beso!


Archivo del blog


people