Miro eso y comprendo que me duele, e intento seguir y con una sonrisa esconder ese dolor. No me tengo que demostrar débil frente a vos. No debo... Que lindo sería perder la memoria en estos momentos, y olvidar porqué motivos lloro, (a esta altura de la vida, prefiero llorar por no saber el motivo de mi llanto). Te juro que hice y sigo haciendo todo por hacerte entender que te amo, que este sentimiento no es nuevo, que sin vos no puedo. Comprendo que, hace exactamente dos años, elegiste seguir sin mi, y aunque volvías, tenía muy bien en claro que parte de vos no estaba acá conmigo, sin embargo te seguía. Hoy admito que en partes fue culpa mía, por no haberme aferrado a tu corazón aquel día. Te habías convertido en mi inspiración, en ese algo por las que las personas mueren, o simplemente matan. Te habías convertido en mi todo, ese "todo" que al no tenerte se convierte en NADA. Me odio, me odio, me odio.
Te dejé ir y me odio. Detesto con toda mi alma pararme a pensar en el "¿Qué hubiera pasado si...?". NOOO, NO! Hubiera sido todo diferente! Hoy estarías amándome a mi. Hoy sería única para vos. Hoy no esconderías todos esos sentimientos. ME ODIO. Y me cuesta no soltar lágrimas al ver tus dedicaciones hacia ella. No quiero aceptarlo, nunca quise perderte. TE AMO. Y como si nada tengo que volver a sonreír...
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